Las distorsiones y alertas por Kast durmiendo en La Moneda

El exasesor del Segundo Piso presidencial, Alfredo Riquelme, indicó que “después del sacrificio entre sus ruinas del presidente Allende, ni el dictador que ordenó bombardearla se atrevió a instalarse en ella con familia, camas y petacas”. La presidenta de la AFEP, Alicia Lira, expresó que “estamos alertas porque ese es un sitio de memoria, en su interior hay zonas y objetos de homenaje al Presidente Salvador Allende, está el recuerdo de los compañeros del GAP que murieron combatiendo en defensa del Presidente, la reivindicación que hizo este gobierno en La Moneda de periodistas detenidos desaparecidos y ejecutados políticos, con una placa en la sala de prensa”. Para el historiador Rolando Álvarez, la decisión del presidente electo de instalarse a vivir en el palacio presidencial, es propio del “sentido aristocratizante de la familia millonaria que supuestamente vive sobriamente, sin hacer aspavientos de su riqueza” y destacar un “símbolo del afán restaurador de su gobierno” en un sentido conservador.

Gonzalo Magueda. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 21/12/2025. Hay temores en cuanto a que José Antonio Kast llegue a vivir en el palacio presidencial de La Moneda, que convierta ese sitio republicano e histórico en su dormitorio.

No se descarta que podría convertir el episodio en una distorsión en la historia de ese lugar y que incluso quiera hacer desaparecer -una práctica habitual en su sector político- los espacios de memoria en el recinto, incluidos los dedicados al Presidente Salvador Allende que murió allí resistiendo el golpe de Estado que, hasta hoy, Kast respalda con entusiasmo.

El historiador y exasesor del Segundo Piso presidencial durante el mandato de Ricardo Lagos, Alfredo Riquelme, escribió en X, en tono de advertencia: “La Moneda es un palacio de gobierno y un sitio cargado de sacralidad republicana que debe ser respetado y honrado. No es una casa habitación”.

Y luego enfatizó que “después del sacrificio entre sus ruinas del presidente Allende, ni el dictador que ordenó bombardearla se atrevió a instalarse en ella con familia, camas y petacas tras los siete años que duró su reconstrucción. La Moneda no es la casa de ningún presidente y los suyos. Es y debe seguir siendo la casa de todos los chilenos”.

En la última semana, Kast, como presidente electo, hizo ver que se iría a vivir al palacio presidencial junto a su esposa (quedó en duda con cuántos de sus nueve hijos), entre otras cosas porque ellos son “austeros” y como una de las señales populistas que quiere dar iniciando su administración. Su hijo, José Antonio Kast Adriasola, declaró que habitar en La Moneda “es una medida que tiene que ver con el tema de la austeridad”.

Ante esa posibilidad, Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP), indicó que “nos parece impresentable” esa opción y opinó que esa decisión del presidente electo “tiene un propósito político de su parte”. Precisó que “estamos alertas porque ese es un sitio de memoria, en su interior hay zonas y objetos de homenaje al Presidente Salvador Allende, está el recuerdo de los compañeros del GAP que murieron combatiendo en defensa del Presidente, la reivindicación que hizo este gobierno en La Moneda de periodistas detenidos desaparecidos y ejecutados políticos, con una placa en la sala de prensa en homenaje a ellos”.

Añadió que “más que temor estamos alertas ante la posibilidad de un plan que tenga este personaje de la extrema derecha de ir a vivir a La Moneda, borrar la memoria que ella contiene, y que busque resquicios legales para eliminar espacios y homenajes”. “Quizá tenga un delirio como el de Donald Trump de modificar la Casa Blanca, de imponer sus figuras, y hacerlo aquí en La Moneda nuestra”, enfatizó la dirigenta de derechos humanos en declaraciones a ElSiglo.cl.

Ante la versión de Kast y su familia de que habitar en el palacio presidencial es un signo de austeridad, Alicia Lira expresó que “es todo lo contrario, es para ahorrarse gastos, enriquecerse más”.

Frente a la posibilidad de que José Antonio Kast llegue con “camas y petacas” a La Moneda, el historiador Rolando Álvarez sostuvo que “claramente es una decisión que pretende proyectar valores y un estilo de gobernar”.

Recordó que “el último presidente que vivió en La Moneda fue el general Carlos Ibáñez del Campo durante la década de los años cincuenta del siglo pasado. En ese sentido, la decisión de Kast implica rescatar una tradición, lo que puede ser interpretado como un símbolo del afán restaurador de su gobierno. Y cuando decimos ‘restaurador’, lo hacemos en el sentido más conservador de la palabra, de comprender el pasado como un mundo mejor y deseable de recuperar. Así, vivir en La Moneda proyecta la imagen del Chile tradicional, previo a las experiencias de los gobiernos reformistas y revolucionarios de la década de los años 60 y principios de los 70”.

En declaraciones a ElSiglo.cl, el historiador añadió: “Kast ha sido explícito en señalar que esta decisión quiere ser una señal de austeridad fiscal, en oposición a la del actual presidente. Estos son principios que, nuevamente, nos retrotraen al Chile tradicional. Es el sentido aristocratizante de la familia millonaria que supuestamente vive sobriamente, sin hacer aspavientos de su riqueza. En otras palabras, es el intento de hacer un contraste con las formas supuestamente frívolas y derrochadoras de sus antecesores”.

Álvarez expresó que “de acuerdo a los principios conservadores del presidente electo, instalarse a vivir en el mismo lugar en que se trabajará, es una apuesta por representar un servicio de 24/7, incluida su familia”. Enfatizó que “es equivalente a un voluntariado o sacrificio por el país, dejar, supuestamente, las comodidades de su hogar para ‘trabajar por Chile’”.

“La opción de Kast de vivir en el palacio de La Moneda, es una decisión que se debe entenderse a la luz de los principios ultraconservadores de caridad cristiana como era entendida en el siglo XIX y principios del siglo XX”.

Se sabe que hay alertas tanto en el gobierno como entre legisladores y dirigentes del oficialismo respecto a lo qué haga José Antonio Kast con los espacios dentro del palacio presidencial, y si aquello se ajustará o no a normativas legales y a protocolos o procedimientos que podrían estar en el ámbito de Monumentos Nacionales.

 

 

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