Las movilizaciones de “Abuelas contra la derecha” en Europa

Se manifiestan contra el fascismo y el neonazismo, principalmente en Austria y Alemania. Realizan marchas y ocupan espacios públicos en varias ciudades. “Nuestra motivación para estar en la calle, aquello por lo que protestamos, es esa evolución de la radicalización de ultraderecha” expresó Anna Ohnweiler, fundadora de las “Omas gegen rechts”. Llevan ochenta marchas en los últimos meses.

“El Siglo”. Agencias. 9/3/2025. Conocen a los fascistas. Sus métodos. Sus ideas. Algunas vivieron la presencia del nazismo. Por eso han salido con tenacidad y decisión a hacerle frente a quienes están reviviendo al fascismo, incluso al neonazismo, y a la extrema derecha que sostiene posiciones fascistas, ultraconservadoras, restrictivas de derechos, anti-migrantes y misóginas.

 Son las “Abuelas contra la derecha” organizadas, inicialmente, en Austria y Alemania y que en los últimos meses han protagonizado movilizaciones y expresiones públicas antifascistas en decenas de ciudades. Llevan ochenta marchas en los últimos meses. Su movimiento se ha trasladado a otros países europeos y hay quienes sostienen que ese concepto, esa idea movilizadora, puede llegar a América Latina. “Queremos montar un movimiento a nivel europeo, hay muchas abuelas y abuelos dispuestos, y jóvenes también” dicen desde el colectivo de estas mujeres antifascistas.

 Conocidas como “Omas gegen rechts”, vienen organizadas desde 2017 ante el asedio ultraderechista. Anna Ohnweiler, fundadora de “Abuelas contra la derecha” en Alemania, dijo al periódico El Español que “nuestra motivación para estar en la calle, aquello por lo que protestamos, es esa evolución de la radicalización de ultraderecha en Alemania”. Y advirtió: “A las Abuelas contra la derecha nos van a encontrar allí donde estén los neonazis, Pegida y AfD”, en referencia a las organizaciones de extrema derecha.

Sostuvo que “en Alemania ya tenemos la experiencia del nacionalsocialismo en el poder y, simplemente, eso no puede volver a ocurrir, no podemos dejar jugar al nacionalismo ni al racismo un papel en política”. “Somos antifascistas, sí, pero tenemos muchas motivaciones para estar movilizadas, también nos dedicamos mucho a laayuda a los refugiados. Muchas personas vienen por una motivación principalmente religiosa”, precisó.

Muchas de estas activistas nacieron durante la Segunda Guerra Mundial y conocieron las crueldades de los nazis. “Me parece inexplicable que, después de nuestra historia nazi, vuelva a haber tanto apoyo a los partidos radicales de derecha”, lamentó Elisabeth Redler, que está en el movimiento de las abuelas.

Varias organizaciones feministas, sindicales y de académicos no sólo siguen de cerca las actividades de las “Omas gegen rechts”, sino que están dando pasos para organizar en países europeos mujeres de la tercera edad, incluidas algunas que vivieron los tiempos del nazismo, y que están disponibles para salirle al paso al fascismo y a la extrema derecha. En América Latina comienza a mirarse esa experiencia.

En estos meses, en declaraciones de parlamentarios y activistas europeos, así como en diversidad de medios de comunicación, se han destacado la valentía y coherencia de estas mujeres que ya son identificadas por sus gorros de lana que ocupan en las marchas.

“Que seas viejo no significa que tengas que quedarte callado”, resaltan. Eva-Maria Singer, que está en este movimiento hace tres años, dijo al medio Swissinfo.ch (SWI) que “mi generación, los llamados sesentayochistas que salimos a la calle contra la vieja camarilla nazi y fascista, pensábamos que la habíamos erradicado, pero no es cierto, vuelve a crecer” y planteó que ante eso hay que movilizarse.

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