“No estamos refundando Chile, estamos haciendo que se parezca a sí mismo”
Las palabras del escritor Jorge Baradit, cuando defendió ante la minoría conservadora de la Convención Constitucional, avanzar en derechos sociales y civiles en la nueva Constitución. “Les invito a no tenerle miedo a la voz de la mayoría” dijo, y añadió que “el país ha tomado control de su destino en esta Convención. Y no es individualista, no es monocromática, ni es mercantilista. Es solidario, lleno de colores y mayoritario”.
Equipo “El Siglo”. 03/2022. Transcripción de las palabras del escritor Jorge Baradit, en la Convención Constitucional:
“Es impresionante los rostros de un sector de la Convención Constitucional cuando se aprueba Estado social de derechos, educación sexual integral, derechos reproductivos, Estado regional. Es el rostro de quienes ven cómo su mundo se desvanece y le da paso a uno que desconocen y al que le temen. Pero no solo sienten que está cambiando, sienten que el país se está derrumbando porque ellos saben cómo deben ser las cosas.
Al inicio, la institucionalidad de aquello llamado Chile, vivía dentro de las ciudades empanizadas, porque afuera estaba la barbarie, estaban los indios, los negros, los mestizos. Adentro, la gente de bien, los colegios, los curas, las cortes y la civilización. Ellos eran Chile. El resto, los indios, los encomiendas que trabajaban para ellos. Luego, ese Chile empanizado se llamaban salitreras, en el centro se llamó fundo, y en el sur se llamaba estancia. El esquema feudal por excelencia.
Esa constante histórica escaló en los pocos siglos que nuestro país tiene, y ese sector sigue pensando que Chile son ellos. Continúan viviendo en ciudades empanizadas, donde habitan juntos, van al colegio juntos, asisten a la misma iglesia, se casan entre ellos y hacen negocios entre ellos. No importa si son más o menos inteligentes, más o menos meritorios, más o menos capaces. Ellos creen que son Chile. Quienes saben cuáles son nuestras tradiciones, cuáles son los valores que debiesen regirnos, cuál es la cultura aceptable y cuál no. Afuera, sus empleados. Esa ciudad empanizada de la colonia, era el oasis a que se refería Piñera.
Pero eso explotó hace un par de años. A ellos los invito a entender que Chile no son sólo ellos, sino que ellos creen que son lo bueno. Sienten que es el fin de Chile porque es el fin de Chile como ellos lo entienden. Chile somos nosotros. Por eso lloran por los rodeos pero no por las diabladas, porque creen que Chile es Colchagua, y deben haber huasos desde Arica hasta Punta Arenas, aunque no tenga ningún sentido, porque no ven más allá de la imagen que ellos tienen de Chile.
Hoy, el país completo ha tomado el control de su destino en esta Convención, por primera vez en su historia. Y no es individualista, no es monocromática, ni es mercantilista. Es solidario, lleno de colores y mayoritario.
Acusan falta de diálogo, pero la verdad es que las visiones pueden dialogar solo hasta cierto punto. Hay un momento en que hay que definirse y ahí es la votación la que decide. La verdad es que las visiones de mundo de la mayoría acá (Convención Constitucional), son demasiado diferentes a las que plantea este pequeño grupo. Incluso cuando algunos de ellos hacen el esfuerzo por acercarse, se dan cuenta que están tan lejos, que ni siquiera ese esfuerzo alcanza. Por eso históricamente han dependido de artilugios para sobre representarse en la vida política. A través del voto censitario, sistema binominal, golpes de Estado. Hoy están desnudos, en un órgano realmente representativo y les cuesta asumir que no tiene el volumen de poder del que regularmente usufructuaban.
Les invito a no tenerle miedo a la voz de la mayoría, el miedo y los fantasmas han sido malos compañeros en nuestra historia. Por temor al cambio al caos, ustedes han generado caos, por temor a un Gobierno que iba a llevar a Chile a un Gobierno autoritario, construyeron un Gobierno autoritario, por temor a la vía democrática al socialismo, levantaron la vía armada al neoliberalismo, por temor a la dictadura del proletariado, instalaron una dictadura militar. ( ) No tengan miedo, el miedo lleva al enojo, el enojo lleva al odio, y el odio lleva al sufrimiento.
Lo único que está ocurriendo, es que se está construyendo por primera vez un Chile no de ustedes, sino de todos. Por eso el Artículo Primero dice Estado social para los trabajadores, por eso dice paridad para las mujeres, por eso dice plurinacional, por eso ecológico, porque es esa otra hermana que también debemos proteger y cuidar. Llamo a aprobar al Artículo Primero que esperamos sean las palabras iniciales de un nuevo Chile. Un Estado social y democrático de derechos, de carácter plurinacional y ecológico, para todos.
No tengan miedo, no estamos refundando Chile, solo estamos haciendo que se parezca a sí mismo, condición fundamental para todos y todas”.