“Esta elección es determinante para el futuro del país”

Guillermo Teillier, presidente del Partido Comunista, indicó que “se juega la continuidad, de manera razonable, del camino que abrió el pueblo a partir del 18 de octubre de 2019”. En esa línea, sostuvo que “si no se va a votar, dejamos la situación en manos de los retrógrados”.

Hugo Guzmán. Periodista. “El Siglo”. Santiago. 19/11/2021. En definitiva, ¿qué se juega en esta elección?

Se juega la continuidad, de manera razonable, del camino que abrió el pueblo a partir del 18 de octubre de 2019. Eso es lo esencial. No da lo mismo quien salga Presidente de la República, si sale Gabriel Boric, indudablemente ese proceso seguirá adelante, y si sale José Antonio Kast, va a tratar de detener ese proceso por todos los medios. Ante esa disyuntiva estamos.

En el período pos dictatorial, quizá esta es la elección presidencial más ríspida, de más confrontación, ¿a qué lo atribuye?

Primero, a que hay un modelo que está fracasado, donde funcionaba la macro economía, pero no la economía de la gente, y poco a poco fue socavando la situación de la mayoría del pueblo chileno con la desigualdad, los bajos salarios, las malas pensiones, los abusos, las malas condiciones sociales. Al fracasar ese modelo, en el país se comenzó a buscar un nuevo proyecto de desarrollo, además una nueva Constitución, es decir, está señalada esta confrontación electoral por la posibilidad de continuar o cambiar el modelo y las condiciones del país. Por eso esta elección es tan decisiva, tan interesante, tan determinante para el futuro del país.

Por cuestionamientos o por respaldos, el Partido Comunista fue protagonista en esta campaña electoral. Si se hiciera un seguimiento, quizá es uno de los partidos políticos más mencionado en la campaña. ¿A qué lo atribuye?

A que el partido se la jugó en todas partes, en las calles, en las redes, de diferentes maneras, tanto por apoyar la candidatura de Gabriel Boric, como por sacar adelante nuestra propia campaña parlamentaria y de consejeros regionales. Pero también porque la ultraderecha sobre todo, aunque también parte del llamado centro político, hicieron gala del anticomunismo como hacía mucho tiempo que no se veía en el país, desde los tiempos de la dictadura, una cosa constante, machacante, de todos los días, tratando de atemorizar al pueblo con una caricatura que hacen de los comunistas. Pero el pueblo nos conoce, la gente sabe que es el partido que ha respetado la democracia, que luchó contra la dictadura, que muchas y muchos militantes dieron su vida por el pueblo, que hemos estado junto al pueblo en las protestas, en la pandemia fue un partido que extendió su mano solidaria en las ollas comunes, en los comedores populares, es el partido que ha luchado permanente por los derechos y las reivindicaciones de las mujeres, de los jóvenes, de los adultos mayores, por un medio ambiente vivible, por los pueblos indígenas, los movimientos de sin casa. Es el partido conocido por eso y será reconocido por eso, a pesar de esa cortina de humo del anticomunismo. Además, en estos momentos la gente conoció nuestras ideas y nuestras propuestas y sabe que benefician a amplios sectores de la población.

Sobre todo en los dos últimos años se vio potenciada la movilización social y ciudadana, mucha gente movilizada y participando. Sin embargo, existe el temor de que haya un alto abstencionismo en esta elección.

Hay hechos que desencantan a la gente. La espera de tantos años de tener la posibilidad de solucionar los problemas y finalmente no se solucionan. La corrupción, la institucional como personal, las irregularidades que alcanzan a altos esferas del país. Todo eso a mucha gente la retiene a la hora de ir a votar. Pero diría que seamos consecuentes con lo que el propio pueblo estableció, es decir, un camino hacia la nueva Constitución, nuevo proyecto de desarrollo, más derechos, y para eso hay que ir a votar. Si no se va a votar, dejamos la situación en manos de los retrógrados, de aquellos que votaron por el Rechazo nueva Constitución, que no quieren cambios en el país, y quieren mantener incólume este estado de privilegios para unos pocos.